Desde mediados de la década de 1920 hasta principios de la de 1930, Van Cleef & Arpels concibió varios diseños de “collares de corbata”. Estas elaboradas joyas terminaban en un largo colgante o borla que podía usarse en la parte delantera de un vestido, como una corbata, o colgada asimétricamente sobre un hombro. El estilo se prestaba perfectamente a vestidos con escote en la espalda, mostrando las piedras más grandes en la parte delantera del cuello, una joya suntuosa que habría sido escandalosa en un pasado no muy lejano. Los vestidos glamorosos, elegantes y ceñidos de satén cortados al bies ocuparon un lugar destacado en la moda de noche de principios de la década de 1930, como lo ejemplificó la diseñadora Madeleine Vionnet. La calidad finamente articulada y similar a una tela del collar de corbata complementa esta estética a la perfección y encapsula todo el estilo, la belleza y el encanto de la época.
Este período vio un florecimiento de diseños novedosos, con Van Cleef & Arpels a la vanguardia de la innovación. Fue durante estos años que la venerada maison desarrolló su característico entorno misterioso y neceser con joyas, la minaudière. La miniaudiére era una especie de estuche diseñado en distintos metales, para que las mujeres de la época llevaran un lápiz de labio, un encendedor, una boquilla o cigarrillos, pueden verlo en este link https://www.vancleefarpels.com/es/es/the-maison/articles/the-minaudiere.html
El collar de corbata es un excelente ejemplo de las fuerzas creativas de Van Cleef & Arpels. Durante la década de 1920, los joyeros parisinos habían creado una variedad de broches para los hombros largos, articulados y ricamente adornados; el collar de corbata puede verse, en parte, como una evolución de esta forma. Además, los collares de corbata proporcionaron amplios marcos en los que exhibir los eslabones altamente geométricos y los diamantes de diversas formas que caracterizan el estilo art déco.
Como solía ocurrir, otros joyeros siguieron el ejemplo de Van Cleef & Arpels y el collar de corbata no fue una excepción. A mediados de la década de 1930, el gusto por los collares largos había dado paso a estilos con pechera y cuellos más cortos, y los collares con corbata parecen haber sido descontinuados en 1935. La naturaleza lujosa de los collares con corbata era tal que solo un puñado de ejemplos fueron alguna vez producido. Como piezas virtuosas que mostraban lo mejor del arte del joyero, fueron capturadas en las páginas de Vogue y lucidas por estrellas de cine como Mary Pickford.
Es extremadamente raro encontrar un collar de corbata de Van Cleef & Arpels y el ejemplo que se ofrece aquí es el primero de su tipo que sale a subasta en los últimos tiempos.
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